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Personalizar y transmitir las bondades de una marca de manera solapada, natural y estratégica. De eso se trata hacer regalos empresariales. Ir de lo masivo a lo personal, aprovechando las virtudes de una herramienta tan sólida como poderosa, que no pasa de moda, se mueve de mano en mano y llega a prácticamente todos, ¡llevando tu logo!
¿A quién no le gusta que le obsequien? Un regalo corporativo es un recuerdo de tu marca, un mensaje transmitido sin sonar invasivo, que logra su cometido según su fin: instalarse en la mente de tu cliente potencial, generar una conexión poderosa con tu público actual, empatizar con tus empleados que sienten la pertenencia y por eso se vuelven más productivos, potenciar tu imagen de marca y comunicar valores, y lógicamente, introducir un producto o servicio nuevo en el mercado.
Definitivamente, los regalos empresariales originales hacen la diferencia. Dar una bienvenida, potenciar un evento, workshop o encuentro, significar una fecha importante, agradecer el esfuerzo de un grupo de trabajo o auspiciar a terceros, se vuelve clave y ventajoso cuando incorpora esta herramienta personalizada a su acción. ¿Lo estás aprovechando al cien por cien?
